'Todas las palabras del mundo', de Jorge Macchi (2024). Foto: Ann Sophie Deldycke

'Todas las palabras del mundo', de Jorge Macchi (2024). Foto: Ann Sophie Deldycke

Arte internacional ESPECIAL FLANDES

Beaufort, la escultura como tejido de vida

La Trienal de Beaufort, que recorre los más de 60 kilómetros de las playas de Flandes, permite visitar 18 nuevas instalaciones artísticas, de las que ocho quedarán para siempre en su paisaje costero.

1 mayo, 2024 01:52

Nacida en 2003, la Trienal de Beaufort es uno de los certámenes de arte público más consolidado en el panorama internacional. Desde De Panne hasta Knokke-Heist, las instalaciones escultóricas del certamen recorrerán con sus diferentes propuestas toda la costa flamenca.

El carácter temporal de la Trienal hace que varias de las intervenciones artísticas –que se instalan o bien sobre la playa o bien en el núcleo urbano de poblaciones costeras– se desmonten al finalizar el plazo indicado, pero algunas terminarán formando parte del paisaje flamenco.

Beaufort24 se inauguró el pasado 27 de marzo y se prolongará hasta el 3 de noviembre de 2024. Para esta octava edición de la Trienal la comisaria Els Wuyts invitó a 18 artistas internacionales: los belgas Filip Vervaet, Maëlle Dufour, Johan Creten y Jef Meyer, el argentino Jorge Macchi, la española Selva Aparicio, la alemana Alexandra Bircken y el matrimonio angloargentino formado por Lucy + Jorge Orta. 

El más veterano de los artistas presentes es el británico Richard Deacon, ganador del prestigioso Premio Turner

Además, la neerlandesa Femmy Otten, el rumano Marius Ritiu, la finlandesa Sara Bjarland, la taiwanesa Pei-Hsuan  Wang, el kosovar Driton Selmani, la polaca Monika Sosnowska, el galés Richard Deacon, el angloturco Ivan Morison y dos artistas franceses independientes, Romain Weintzem y Lucie Lanzini.

Ocho de estos trabajos formarán parte permanente de lo que ya se conoce como el Parque Escultórico de Beaufort, que cuenta ya con 50 obras. Lo que caracterizó a la Trienal desde el primer momento fue su carácter cercano, accesible.

Arte, incluso, tocable. El ciudadano aprecia encontrarse rincones en los que el arte amplía la mirada o estimula la imaginación. En esta edición, el lema es ‘Tejido de vida’.

Ciñéndonos a las obras que perdurarán más allá del final de la Trienal, el más famoso (y veterano) de los artistas presentes en es el británico Richard Deacon, ganador del prestigioso premio Turner en 1987.

Este interviene con N/E/W/S, una referencia tanto a las noticias que llegan de todas direcciones como a los cuatro puntos cardinales, en inglés, a los que mira, como una brújula, cada una de las caras de la obra.

El recorrido, visitable a pie, en bicicleta o en tranvía a través de distintos itinerarios, nos ofrece estampas sorprendentes, como la transformación que ha sufrido la plaza situada frente a la iglesia de San Pedro, en De Panne, donde Filip Vervaet ha instalado Staging Sea, una especie de pabellón en cuyo interior brota una fuente que conecta con el cercano océano y su chorro oscila en altura según sube o baja la marea…

'Monobloc Moments', de  Sara Bjarland (2024). Foto: Ann Sophie Deldycke

'Monobloc Moments', de Sara Bjarland (2024). Foto: Ann Sophie Deldycke

Ese mismo efecto es el que se produce en The Herring, la escultura de Johan Creten situada en la playa de Koksijde: con la marea alta, el agua del mar roza la base de la enorme estatua; con la marea baja, el mar queda a unos cuatrocientos metros de distancia.

En una céntrica plaza de Ostende, Femmy Otten ha instalado Moeder, una estatua en mármol de una mujer embarazada, que representa, exactamente, su propio embarazo durante la creación de la pieza.

[Dieric Bouts expande el horizonte de Flandes]

En el muelle de Blankenberge se ha montado Attentifs ensemble, una estructura formada por ocho asientos de madera separados por tabiques de acero que recuerdan el estilo art nouveau, obra de Romain Weintzem, diseñador de esculturas funcionales, que invita a ocho personas a sentarse una al lado de la otra y a observar el paisaje desde ocho puntos de vista diferentes.

También tiene una función utilitaria de descanso At Rest, de la española Selva Aparicio, en un parque de Nieuwpoort. La obra es una escultura con un banco para sentarse, construida con infinidad de teselas cuadradas de bronce en las que se han plasmado las huellas de las palmas de las manos de vecinos de la ciudad.

La ubicación de Gazin Ball: Reflective Dialogues, de Lucy + Jorge Orta es también premeditada: en medio de un parque infantil de la localidad de Middelkerke. Finalmente, Monobloc Moments, de Sara Bjarland, es una estructura que representa, en bronce, las típicas sillas de plástico de terraza de bar existentes casi en cualquier lugar del mundo, instalada en una rotonda de De Haan.

Más información en: www.triennalebeaufort.be/en